Pues sopla, hija, sopla. En el día a día, los más pequeños tienen quehacer frente a retos que a ellos les parecen insuperables, aunque los adultos los veancomo algo nimio; en este caso, la sopa a una temperatura imposible.Superar esos retos forma parte de un natural proceso de aprendizaje y de crecimiento, dondela imaginación se convierte en el más valioso recurso del que dispone un niño.