Hay una imagen del futbolista profesional, sobre todo de las grandes figuras de este deporte, que ha acabado por imponerse: la de unos jóvenes millonarios y famosos que viven en su propia burbuja de lujo y privilegios.O sea, fuera del mundo. No es una imagen falsa, pero sí reducida. Y es que hay otra imagen posible del futbolista, la más bella, la que han contribuido a ofrecer con su ejemplo los protagonistas de este libro, desde Drogba a Obdulio Varela, desde Zarra a Carlos Caszely, desde las Dick Kerrs Ladies a Duncan Edwards... El fútbol les debe mucho y recordarlos es una forma de pagar esa deuda.