Heridas del cuerpo, heridas del alma, heridas del corazón. ¿Tiene el amor poder de curación?
Marta y Moisés tienen su primer encuentro de la forma más absurda y surrealista. No se conocen, nunca antes se habían visto, pero sienten una conexión tan especial que no pueden evitar buscarse una y otra vez, a pesar de encontrarse ambos en proceso de curación.
Él lo ha perdido todo.
Ella se siente perdida.
Él no cree que nadie pueda volver a amarlo.
Ella sabe que nunca ha sido amada.
Él tiene demasiadas heridas.
Ella acaba de descubrir las suyas.
Tal vez crean ellos que no se conocen, pero dicen que, en ocasiones, el corazón es capaz de saber lo que la mente ignora.