En las remotas islas Shetland, cerca del Círculo Polar Ártico, un pequeño grupo de habitantes con fuerte identidad vikinga sobrevive en condiciones extremas, gracias a una raza robusta de ponis que ha evolucionado para adaptarse al clima gélido. Hasta allí llegó Catherine Munro para indagar en esta relación única entre los seres humanos y los ponis. Al principio su objetivo era investigar desde un punto de vista teórico, pero la vida y los titánicos elementos que gobiernan el lugar tomaron la iniciativa. Así, tal como nos relata en estas extraordinarias memorias salvajes, tras sufrir una terrible pérdida personal, Catherine encuentra, además de consuelo, una conexión con las gentes y los animales que habitan ese territorio salvaje. Y toma una decisión que cambiará su vida para siempre.