En agosto de 1971 la situación del transporte interurbano de viajeros en Gran Canaria era caótica. La prolongada huelga de los trabajadores de la empresa concesionaria de dicho servicio, AICASA, debido al retraso en el abono de sus salarios, obligó no solo a abordar este problema, sino el de la reordenación de los transportes de la isla. Con el paro los trabajadores consiguieron, además, crear su propia empresa laboral, SALCAI. Todo ello es lo que se explica en la presente obra. La situación a la que se había llegado. Sus causas. El desarrollo de la huelga. Los esfuerzos realizados para alcanzar una solución. Y la fórmula finalmente adoptada.