Cuando Gregorio Marañón cumplió diecinueve años, respondió así a la pregunta que le hicieron en una entrevista sobre cómo se veía en el futuro: "Quiero un porvenir en el que vayan juntas, pero separadas, como en paralelo, mi vida social y mi vida privada. Formar parte de una generación que deje huella firme de su paso e influir en mi generación. Triunfar en un trabajo que me guste, aunque sea difícil y requiera mucho esfuerzo. Tener un lugar en el campo o junto al mar para ir a descansar trabajando. Disponer de mis horas y no tener tiempo ocioso. Vivir un gran amor y contar con buenos amigos. Que los ideales de ahora sean siempre los mismos. Y que todo este sueño se cumpla, desde el principio, pronto, lo antes posible". Ese proyecto de vida, debidamente actualizado, lo ha mantenido, en lo esencial, siempre. Fue el camino que se trazó y el que ha recorrido transitando por diferentes ámbitos: la cultura, el derecho, la banca, la empresa, la política y la comunicación. Este libro refleja el fruto de su vocación, las circunstancias de su vida y el juego del azar, que generalmente le ha sido favorable. A través de sus páginas trata de mostrar cómo y en qué medida ha llegado a ser lo que soñó, mientras su vida continúa haciéndose…