Federico está un poco sorprendido porque su papá, que tiene una pescadería, lo llevó a pescar al hielo en su único día de descanso. Instalados en su cabañita sobre la nieve, lanzan sus cañas. Cuando el padre sale a buscar leña, el hielo se desprende de la costa y Fede, su gato y su cabaña emprenden un singular viaje.