El Gobi recibe al visitante con paisajes imponentes aislados entre vastas llanuras de desolación donde los móviles se quedan sin cobertura y el silencio alcanza niveles insospechados. La dureza del entorno puede apabullar, pero aquí es donde el follaje del desierto brilla con tonos verdes y dorados y donde los lamas tibetanos grabaron antiguos mensajes en los riscos de roca roja. El viajero verá caballos pastando y gacelas a la carrera, oirá el balido de cabras y ovejas y se compadecerá de los camellos que se amontonan para protegerse del viento implacable de la estepa. Y de noche podrá ver cómo el cielo se llena de galaxias.
• Dar un paso adelante y resbalar tres atrás en las imponentes dunas de arena de Khongoryn Els.
• Ir en caza de fósiles en los bonitos "Acantilados Llameantes" de Bayanzag, zona rica en huesos y huevos fosilizados de dinosaurio.
• Trepar por las rocas de Ikh Nartiin Chuluu en busca de argalíes (muflones asiáticos).
• Mapas.
• Transporte.
Incluye: Dundgovi, Mandalgov, Erdenedalai, Ikh Gazryn Chuluu, Dornogovi, Sainshand, Ikh Nartiin Chuluu, Ömnögovi, Dalanzadgad, Bayanzag, Bayankhongor, Gov-Altai, Altái.