Colombia anhela desarrollarse y entrar de lleno en la modernidad. Sin embargo, en pleno siglo XXI, este objetivo se ve lejano por la supervivencia de prácticas esotéricas, mágicas y sobrenaturales que permean todos los niveles de la sociedad. En este libro los autores reflexionan sobre este fenómeno particular, con poderosas raíces en el pasado colonial, y que pareció dispararse a mediados del siglo XX. A través de los testimonios de diferentes personas muestran los límites débiles y ondulantes que existen entre religión, esoterismo y sanación con la ciencia. Estas páginas son como un crisol en el que se funden desde las hechiceras juzgadas por la Inquisición hasta personajes como José Gregorio Hernández y Regina 11, pasando por eventos como el Congreso Mundial de Brujería que se llevó a cabo en Bogotá. Todo complementado con pinceladas de astrología, tarot, lectura del café y el tabaco, clarividencia, caminos y puertas hacia esas dimensiones a las que se refería el poeta Paul Éluard con su famosa frase a la que alude el título de esta obra: "Hay otros mundos, pero están en este".