La ciudad es un campo de guerra, una prisión a cielo abierto, en la que el apocalipsis se abate indiferente a la suerte de sus habitantes. En este universo oscuro, decadente y siniestro, Frank Molina, un ángel caído en desgracia, se mueve como pez en el agua.
La ciudad es un campo de guerra, una prisión a cielo abierto, en la que el apocalipsis se abate indiferente a la suerte de sus habitantes. En este universo oscuro, decadente y siniestro, Frank Molina, un ángel caído en desgracia, se mueve como pez en el agua. Un antiguo periodista judicial que lo perdió todo, incluida la cordura, y sobrevive con un trabajo de detective privado en una oficina en el barrio Siete de Agosto. Un alucinado irredento al que las autoridades acuden cuando tienen casos extraños, difíciles de resolver, y necesitan a alguien al que no le dé miedo meterse en el barro para descubrir la verdad. En sus investigaciones se cruza con otros habitantes del abismo extraviados como él y confronta a mafiosos sanguinarios y políticos corruptos empeñados en mantener ocultas sus acciones. Frank es un Ulises contemporáneo y estas cuatro novelas —Lady Masacre, La melancolía de los feos, Diario del fin del mundo, Akelarre— son su odisea por las cloacas de un mundo que desaparece.