Este libro expone qué motivos llevaron a Salinas a escribir teatro en su madurez. Si los expertos señalan la nostalgia de la patria y la necesidad de escuchar la propia lengua, este ensayo se centrará en aspectos no tratados que pudieron incentivar el interés de Salinas por la dramaturgia: en concreto, la posibilidad de proyectar los propios conflictos personales en la escena y su valor como instrumento pedagógico en la actividad docente.