Las bandas narcos mantienen sitiada la ciudad de Rosario y solo una mujer, la oficial de policía Silvana Aguirre, tendrá la valentía de buscar la verdad.
Las bandas narcos mantienen en vilo a Rosario, todos los días alguien mata y alguien muere en la ciudad que los medios de comunicación nacionales llaman la "Medellín de la Argentina". Los delincuentes esconden el dinero por la venta de drogas en departamentos del centro, las madres lloran a los hijos que perdieron en medio de balaceras, los mafiosos cierran grandes negocios en las torres que dan al río y el poder político asiste cómplice al espectáculo del terror. En este caos, la oficial de policía Silvana Aguirre, jefa del Departamento de Criminología, deberá resolver tres casos en los que se jugará no solo su prestigio sino también la vida.
Siempre malhumorada, irónica, lengua larga, intransigente, fantasiosa, y a la vez valiente y honesta, Aguirre no descansará hasta llegar a la verdad. Y en esos días de muerte, se perderá en la ciudad manchada de sangre, pero que aún guarda sus encantos en el agua marrón del Paraná, el puente hacia Victoria, las canchas de fútbol, los boliches y las calles, donde supo amar y donde todavía sueña con un mundo menos injusto.
Pobres corazones se inscribe en la herencia argentina de ficción de calidad con personajes adorables que acompañarán a los lectores más allá de esta novela, una trama impecable y un humor poco frecuente dentro del género policial.