En conflictos internos alrededor del mundo, los civiles desarmados asumen enormes riesgos para protegerse a sí mismos y enfrentar a combatientes armados. Esto no solo es contraintuitivo, es extraordinario. En este libro, Oliver Kaplan analiza casos de Colombia, así como de Afganistán, Pakistán, Siria y Filipinas, para mostrar cómo y por qué los civiles pueden influenciar a los actores armados y limitar la violencia. Basándose en trabajo de campo y análisis estadístico, el libro pretende explicar cómo la organización y la cohesión posibilitan estrategias, tanto encubiertas como públicas, que incluyen evitación, culturas de paz, resolución de conflictos, engaño, protesta y negociación. Estas estrategias de autonomía ayudan a las comunidades a preservar la condición de civiles y evitar retaliaciones, limitando los avances de los grupos armados. En contraste con las visiones convencionales que presentan a los civiles como víctimas indefensas, este libro resalta su iniciativa creativa para conservar la posibilidad de tomar decisiones para sus comunidades.