«Obra profunda y fascinante que desnuda un letal prejuicio milenario. La
respalda una potente documentación. Sus páginas informan y sorprenden,
denuncian y enseñan». Marcos Aguinis
La relación entre cristianos y judíos tuvo mal comienzo y peor
desarrollo. Julián Schvindlerman revela el modo en que durante siglos,
los Padres de la Iglesia han demonizado a los judíos de una manera tan
feroz y consistente que, para cuando seis millones de ellos fueron
exterminados por los nazis durante la primera mitad del siglo XX, muchos
vieron allí un desenlace lógico. A partir de entonces, el Papado revisó
su actitud hacia el pueblo judío, encontrándose en el Concilio Vaticano
II (1962-1965) la manifestación más acabada de esta nueva visión. Desde
finales del siglo XIX y a lo largo del siglo pasado, la idea de un
estado judío, primero, y el establecimiento del Estado de Israel,
después, crearon un desafío político, teológico y psicológico para el
Vaticano. La respuesta de la Santa Sede a estos monumentales desarrollos
de la historia moderna es narrada en estas páginas impecablemente
documentadas, ofreciendo al lector la oportunidad de sumergirse en un
tema cautivante y de enorme actualidad.