Pío Enarino ha sido educado en la rigurosa disciplina de su beata y acaudalada tía Espléndida, que de muy niño lo apartó del mundo. Tras la muerte de ella, Pío tiene una iluminación que le mueve a utilizar su sustanciosa herencia para cambiar el mundo conforme a su divina visión. Una vez echado al siglo, tratará de expurgar todos los males de la sociedad, en particular los de su descreída familia, ansiosa por arrancarle su bien merecida herencia.