Se le llevaron la risa es una colección de cuentos que explora algunas de las circunstancias más oscuras de la condición humana, como el suicidio, el abuso sexual, la infidelidad, los estragos de la vejez, la soledad del exiliado, o la impotencia de la infancia ante la crueldad de los adultos, y deja al lector absorto ante unas existencias que naufragan en el torbellino de sus propios errores, o en la fatalidad de simplemente existir en una sociedad con otros. La autora sabe tejer finamente sus historias, con maestría y sencillez, sin complacencias ni esperanzas fatuas, y nos enseña a sus personajes sin adornos ni idealismos, con la franqueza de la vida desnuda, especialmente dolorosa cuando nos supera la vileza de la que solamente somos capaces los seres humanos.
Pero el lector también encontrará un rayo de luz en estas páginas, porque al lado de la muerte siempre estará el amor en la memoria del que sobrevive; junto a la niña a la que “se le llevaron la risa” su capacidad para reponerse y construir una vida digna; el desamor siempre acompañado de la amistad, el amor fraternal o la lucidez de una soledad consciente y feliz.