Este libro anhela referir lo vivido, pero también lo leído y lo soñado; esto es, combina testimonios y elucubraciones, moviéndose libremente entre la ficción y la no ficción, y, al amparo de dicha libertad, su escritura recurre a diversos géneros literarios: crónica, cuento, semblanza, ensayo, teatro. Con Seis capítulos perdidos y otros extravíos, no cabe duda, se afianza un autor curioso y evocativo en sus últimos años. Para él, más que nunca, leer es igual a soñar, y vivir, igual a jugar. Fernando Ampuero juega con su memoria, con su fantasía, con sus nostalgias, con su mirada a la belleza del mundo, y con todo ello, gracias a su prosa sobria y su ironía, compone una feliz miscelánea.