Con más de quince años de experiencia como nutricionista, Jesica Lavia cuestiona la gordofobia y reclama dejar de estigmatizar y patologizar a las personas por el tamaño de sus cuerpos y "entender todas las aristas que afectan no solo lo que comemos, sino el acceso a lo que comemos y cómo nos relacionamos con nuestra alimentación. Entender cómo lo cultural nos atraviesa y la urgencia de que el cambio sea colectivo".
Argentina ocupa el segundo lugar a nivel mundial con más casos de trastornos de la conducta alimentaria. Este es un claro indicador de que vivimos en una sociedad en la que la delgadez es un valor y un ideal por alcanzar. Cualquiera que se desvíe de ese camino sufre discriminación social y también médica, porque hasta en un consultorio se alarman si nuestro peso se escapa de los índices que determinan cuándo estamos obesos. Esto está generando una cultura de dietas y una ola cada vez más grande de gordofobia, que van minando nuestra salud mental y pueden disparar varios trastornos de la alimentación.
Con más de quince años de experiencia como licenciada en Nutrición, Jesica Lavia ofrece una mirada cruda y realista sobre este problema, al tiempo que reclama y propone un cambio de paradigma para dejar de estigmatizar, oprimir y patologizar a las personas por el tamaño de sus cuerpos. Y "entender todas las aristas que afectan no solo lo que comemos, sino el acceso a lo que comemos y cómo nos relacionamos con nuestra alimentación. Comprender cómo lo cultural nos atraviesa y la urgencia de que el cambio sea colectivo".