No estamos viviendo una era de cambios, sino un cambio de era, el comienzo de la Cuarta Revolución Industrial. Los desarrollos en Internet de las Cosas (IoT), genética, inteligencia artificial, realidad aumentada y virtual, robótica, nanotecnología, coches autónomos, impresión 3D y biotecnología, por citar algunos ejemplos, avanzan a un ritmo sin precedentes. Son tecnologías muy diversas pero que tienen algo en común, la digitalización.
Es imprescindible seguir impulsando el desarrollo de las infraestructuras. El 5G transformará radicalmente el acceso móvil y la arquitectura de las redes, permitiendo un uso más eficiente de los recursos.
Se vislumbra la inteligencia cognitiva que permitirá solucionar problemas de salud, educación, energía y transporte, con impacto positivo en la vida de las personas. Cambiaremos el modo de relacionarnos entre nosotros y con nuestros clientes.