Camilo Ballesta, la joven estrella de la canción violenta, está herido, y atraviesa los áridos paisajes de Baja California, en el noroeste mexicano, buscando refugio. ¿Quiénes han querido matarlo y por qué? Hasta allí ha llegado, como tantos otros, persiguiendo el sueño americano.
Preocupada por la falta de noticias, en Trujillo, Perú, su madre languidece entre cartas, remordimientos y recuerdos. Empujado por ella, su padre intentará ir tras sus pasos, y en ese camino, al tiempo que se le revelarán todos los puntos ciegos que han conformado la vida de su hijo, descubrirá también su propio destino.
Con elementos del western, del relato policial, del narcocorrido o del road movie, esta primera novela de Charlie Becerra deslumbra por su capacidad para mezclar la épica de la aventura individual, el drama social contemporáneo y los elementos propios de la tragedia griega. Nada está ausente en ella; ni el humor ni el amor, tampoco el crimen organizado ni la corrupción policial. La ambición de su estructura encuentra en los recodos de Bolaño, de Rulfo o de McCarthy, pero también de Peckinpah, de Tarantino o de los hermanos Coen, los recursos que solo un narrador con gran pulso puede conectar en un estilo propio.