En el corazón de esta tierra central se halla Berna, la tranquila ciudad que es capital de Suiza pese a que la mayoría de la gente crea que lo son Ginebra o Zúrich. Tiene un casco antiguo (s. xv) de cuento, declarado Patrimonio Mundial, con escalonados edificios de piedra, soportales, torres del reloj, calles adoquinadas y aire muy relajado.
• Deambular por el adoquinado casco antiguo de Berna (Berner Altstadt), magníficamente conservado.
• Mapas.
• Recordar en Berna tiempos no tan lejanos, cuando los smartphones no regían el mundo, en el Museum für Kommunikation.
• Transporte.
• Filosofar sobre la mente de Einstein en el didáctico Historisches Museum de Berna.
• Restaurantes y alojamiento.
Incluye: Berna, Emmental, Solothurn.