Hermoso, rico culturalmente, seguro, asequible y muy a mano desde Durban y Johannesburgo, el montañoso Lesoto es un destino muy infravalorado. El contraste con Sudáfrica no podría ser más llamativo, y de ello dan fe la inconfundible personalidad de los basoto y la topografía extrema del país. Además, sus alojamientos de montaña y enclaves comerciales ofrecen una perspectiva renovada del sur de África.
• Hospedarse en un singular lodge en Semonkong, Malealea, Roma o Ramabanta.
• Mapas.
• Deleitarse con las vistas y los senderos de las tierras altas del norte en el puerto de Sani.
• Transporte.
• Buscar huellas de dinosaurios en Quthing, al sur de Lesoto.
• Restaurantes y alojamiento.
Incluye: Maseru, Morija, Roma, Thaba-Bosiu, Tierras altas del noreste, Semonkong, Malealea, Mafeteng, Quthing.