Tailandia es una tierra exuberante, muy bella y hospitalaria. La costa impresionante que bañan mares cerúleos convida a los viajeros cansados del invierno, mientras que las montañas del norte que se funden en el horizonte brumoso invitan a paseos panorámicos. Entre medias tanto los arrozales como las ciudades prosperan en torno a templos sagrados. Los mercados exhiben pirámides de frutas multicolor y hay delicias para probar en cada esquina.
• Sumarse a las multitudes y el caos en la hiperactiva Bangkok.
• Mapas.
• Empaparse de puestas de sol en Ko Pha-Ngan.
• Transporte.
• Conseguir el certificado de submarinismo en Ko Tao.
• Restaurantes y alojamiento.
Incluye: Bangkok, Sukhotai, Chiang Mai, Chiang Rai, Triángulo de Oro, Kanchanaburi, Surin, Ko Samet, Ko Chang, Hua Hin, Ko Samui, Ko Pha-Ngan, Ko Tao, La costa de Andamán.