Una novela romántica donde los protagonistas se enfrentan a sus propios prejuicios. Castiel y Valerie se burlan de los clichés del amor novelado y, al conocerse, entran en un juego de retos para burlarse de las etiquetas que ellos mismos se han puesto. Así, se ven atrapados en la necesidad de cumplir los roles de “chico bueno” y “chica mala”, pasando tiempo juntos