Bryan Magee ofrece un sustancioso acercamiento al joven Wagner y a sus primeras óperas. A partir de ahí, el autor enfoca su interés en estudiar y exponer la influencia de la filosofía en las óperas del músico; para ello, analiza las repercusiones que tuvieron filósofos como Schopenhauer y Nietzsche en el pensamiento del compositor, y cómo se reflejó esa influencia, de manera especial, en obras como Tristán e Isolda, Los Maestros cantores, El anillo del nibelungo y Parsifal. El libro explora además la existencia de numerosos símbolos y otros elementos de culturas orientales en las óperas de Wagner.