Una espléndida colección de cuentos que convierte la vida cotidiana en pura literatura.
«No parecía que hubiera desacuerdo entre ellos, pero algo raro debía de haber...»
La cita de James Salter que encabeza Anatomía de las distancias cortas resume el espíritu de este espléndido libro de relatos. Nada pasa, nada importante al menos, pero lo que cuenta son los pequeños gestos que convierten una escena cotidiana en un drama o un misterio; basta con mirar esa mano femenina que se mueve con discreción cerca, demasiado cerca, del marido de Lali, o el andar incierto de Paula hacia las escaleras del metro; basta con espiar el cuerpo desnudo de una mujer que duerme en la silla del estudio de Andreu sin que él sepa su nombre, o el andar travieso de una silla de ruedas por las calles de la ciudad.
Haylugar para lo improbable en el día a día de estos espléndidos personajes que necesitan pocas palabras para comunicarse: Marta Orriols, heredera de la prosa de Alice Munro y Margaret Atwood, describe sus gestos con una intensidad que sorprende porque es sobria y emotiva a la vez, y como decía Hitchcock, cuando eso funciona, lo demás sobra.
«Siento decirte que tarde o temprano vas a morir. ¿Ya sabes cómo llenar el espacio entre el aquí y el allá? Ese es tu territorio... agárralo bien.»
Margaret Atwood
Reseñas:
«Un nombre imprescindible en la literatura catalana.»
Isabel Loscertales, Woman
«Hay lugar para lo improbable en el día a día de estos espléndidos personajes que necesitan pocas palabras para comunicarse: Marta Orriols, heredera de la prosa de Alice Munro y Margaret Atwood, describe sus gestos con una intensidad que sorprende porque es sobria y emotiva a la vez, y como decía Hitchcock, cuando eso funciona, lo demás sobra.»
Chema Fernández, El lector que llevas dentro
«Mediante una prosa sencilla, pero intensa, cargada con algunos detalles magníficos que dotan de una emotividad extraordinaria un gesto cualquiera, como es apartar un mechón de pelo, o tomarse un café antes de ir a trabajar, la autora describelas relaciones humanas, la mayoría llenas de secretos inconfesables. [...]»
Diari de Tarragona, Encuentros y desencuentros