Saba debe emprender un largo viaje para rescatar a su hermano, que ha sido capturado por cuatro misteriosos jinetes tras una tormenta de arena...
Saba tiene 18 años y desde que nació vive en Silverlake, una zona solitaria y yerma, asolada por constantes tormentas de arena. Entre las ruinas de una antigua civilización, Saba y sus hermanos -Lugh, su gemelo, y Emmi, la más pequeña de la familia- sobreviven como pueden trabajando en la modesta granja de su padre.
Un día, la tormenta de polvo más devastadora arrasa la zona, y tras ella aparecen cuatro jinetes, vestidos con largas túnicas negras, que acaban con la vida de su padre y se llevan a Lugh como prisionero. Rota de dolor, Saba inicia un larguísimo viaje a pie para encontrar a su hermano.
Un viaje épico en el que conocerá la injusticia, el mal y la muerte, pero también la amistad, el coraje y el amor verdadero. Y descubrirá que, con la ayuda de las personas a quienes quiere, puede conseguir todo, absolutamente todo, lo que se proponga...
«Lugh nació primero, sí. El día más corto de todo el año, cuando el sol está muy bajo en el cielo. Luego yo, dos horas más tarde. Eso es todo, más o menos. Lugh va primero, siempre primero, y yo, pues le sigo detrás. Y no pasa nada. Eso está bien. Es como tiene que ser.»