«Las carretas de la muerte avanzan con estrépito, chirriantes y siniestras, por las calles de Paris. Seis son los que hoy acarrean su ración de vino a la guillotina».
Es el comienzo de la Revolución Francesa. Los campesinos y artesanos, víctimas de las injusticias y los abusos de la nobleza, se levantan con fiera violencia.
El doctor Manette -que había viajado a Londres tras pasar varios años en los fríos calabozos de la Bastilla- vuelve a Francia.